In situ

Pensé que en alguna ocasión escribí desde el dolor... pero no fue dolor lo que sentí... fue una rama de su enorme árbol la que me rozó en aquel entonces... Hoy puedo decir que estoy bajo sus raíces... abrazando el dolor... Y miro hacía arriba y sus ramas infinitas me asustan al verme minúscula... como un insecto al que le han arrancado sus alas y que ahora necesita trepar para sobrevivir. Y necesito llegar hasta la copa del árbol... pero para ello necesito mucho tiempo... necesito hacerlo poco a poco... pero debo llegar... para ver el atardecer de un dolor... pasar la noche... sentir la oscuridad, sentir la ausencia, aceptar una nueva soledad y ver... al fin, un nuevo amanecer... lleno de luz. Lleno de Sol. No quiero, pero debo. Y escucho sus pasos pisar mi sombra, y veo su sonrisa en cada gota que resvala por el cristal, y siento su respiración pausada dentro de mi pecho... y me siento pero no me noto. Me toco y no me siento. No hay herida más difícil de cicatrizar que la del alma... y no hay dolor más terrible que la pérdida... Ya sea relativa o no.. Pero el sentimiento de pérdida es el sentimento de un luto vestido de gamas, de abanicos de posibilidades, de un sinfin de estados, de una eternidad de pensamientos... Y hoy el aire no me asusta, hoy el agua ya no me ahoga, ni el fuego me quema... porque estoy en cenizas... porque he muerto en cierta manera... y si... escucho...

"se fuerte, tu puedes..."

"tiempo, todo lo cura el tiempo... ya verás"

"ánimo que todo se supera"

"no te merece, no malgastes más energía en ello..."

"verás como dentro de poco verás las cosas más claras..."

Si... si... lo se... y agradezco tanto tantísimo esas palabras... agradezco de corazón, a todas aquellas personas que están a mi lado... que me escuchan y que me abrazan... que me apoyan y que me aconsejan... pero ahora no puedo ver eso... ahora lo pienso y se que es cierto, que es real, pero aun no he asimilado las noches sin su mirada, ni las tardes sin sus caricias, ni he asimilado que cada nota, que cada canción es parte de su esencia.. ni he asimilado que una parte de mi alma se fuera de mi para siempre... no asimilo porque no puedo... o quizá porque en el fondo no quiero... no lo se... Y tal y como dice Fito... "quizá la respuesta sea no preguntarse por qué..."

Y me despierto entre sollozos, llorando de pena... tras una pesadilla interminable.. y mi único deseo es seguir soñando... aunque sea dolorosamente... pues mi realidad es aún más tenebrosa que la fantasía de mi inconsciente. Y al menos allí.. en mi mente, me perdono, le perdono. Me abrazo, me abraza.. sin palabras astillantes ni corazones rotos, sin frases entrelazadas de un "quiero y no puedo", y ahora solo me queda sentir las espinas de mis recuerdos... ahí me quedé, entre zarzas y oliendo a pétalos de rosas... sentada frente a un atardecer con los ojos vendados de desilusión...

Es curioso... pero esa mujer llamada Esperanza... me ha arrebatado lo que más quiero... y me ha entregado la desesperanza.... a cambio de que? de sentir... sentir.. sentir...